Inicio
Botánica
Extinción
Flor Cadáver
Flores
La flor cadáver enfrenta un futuro incierto por la mala gestión de datos en jardines botánicos
viernes, abril 04, 2025

La flor cadáver enfrenta un futuro incierto por la mala gestión de datos en jardines botánicos

La mala gestión de registros amenaza la supervivencia de la ‘flor cadáver’

Con tan solo 162 ejemplares conocidos en estado silvestre, el Aro Gigante (Amorphophallus titanum), popularmente conocida como ‘flor cadáver’, enfrenta un futuro incierto. Aunque su situación en la naturaleza ya es crítica debido a la deforestación, el cambio climático y la proliferación de especies invasoras, un nuevo estudio ha revelado que incluso en las colecciones botánicas, donde se supone que estos ejemplares están protegidos y pueden reproducirse de manera controlada, la especie también está en riesgo. La razón: una gestión deficiente de los registros de los individuos mantenidos en cautiverio, lo que provoca cruces inapropiados y una preocupante pérdida de diversidad genética.

Un problema administrativo que pone en riesgo la conservación

Este reciente estudio, publicado en la revista Annals of Botany, fue llevado a cabo por un equipo de investigadores de la Universidad Northwestern y el Jardín Botánico de Chicago. Los científicos analizaron los datos de 1200 Aros Gigantes que se encuentran distribuidos en 111 jardines botánicos de todo el mundo. Su objetivo era evaluar el estado de las poblaciones en cautiverio y determinar cuál es su diversidad genética real. Sin embargo, lo que descubrieron fue alarmante: la falta de registros precisos dificulta una reproducción adecuada de la especie, lo que ha llevado a una alta tasa de endogamia y clonación.

De acuerdo con la investigadora principal, Olivia Murrell, quien realizó este estudio como parte de su maestría en biología vegetal, “la baja diversidad genética conlleva riesgos significativos. Las plantas endogámicas pueden producir menos polen o incluso morir inmediatamente después de florecer”. Un caso documentado en el estudio revela que en una institución botánica, todos los descendientes de una población de Aros Gigantes resultaron ser albinos y no sobrevivieron debido a la falta de clorofila.

El impacto de la endogamia en la supervivencia de la especie

Uno de los descubrimientos más preocupantes del estudio es que el 24% de las plantas analizadas en jardines botánicos son clones de otras, y el 27% de los cruces realizados se llevaron a cabo entre individuos estrechamente emparentados. Esto significa que menos de un tercio de los cruces se realizaron entre individuos no relacionados. La pérdida de diversidad genética afecta negativamente la capacidad de la especie para resistir enfermedades y adaptarse a cambios ambientales.

El fenómeno de la endogamia se debe en gran medida a la falta de información sobre el linaje de cada planta. Sin registros adecuados, los botánicos no pueden tomar decisiones informadas sobre qué individuos cruzar para garantizar una descendencia saludable y genéticamente variada. “No creemos que las instituciones botánicas estén seleccionando intencionalmente la endogamia,” afirma Murrell. “Simplemente no tienen los datos necesarios para evitarlo”.

Las dificultades de la reproducción en cautiverio

La reproducción del Amorphophallus titanumen jardines botánicos es particularmente desafiante debido a su singular ciclo de floración. La planta puede tardar entre siete y diez años en florecer por primera vez, y cuando lo hace, su floración dura solo entre 24 y 48 horas. Además, sus flores masculinas y femeninas no se abren al mismo tiempo, lo que dificulta la polinización natural.

Para superar este obstáculo, los conservacionistas suelen recolectar y almacenar polen de otras plantas para fecundar manualmente las flores femeninas cuando estas se abren. Sin embargo, debido a la falta de registros precisos, muchas veces se termina utilizando polen de la misma planta o de parientes cercanos, lo que agrava el problema de la endogamia.

Una gestión de datos deficiente: un problema global

Los investigadores encontraron que muchas instituciones no documentan adecuadamente el origen y la historia de las plantas que tienen en sus colecciones. En algunos casos, cuando las plantas son transferidas de una institución a otra, los registros no viajan con ellas, lo que provoca la pérdida de información esencial sobre su linaje. “La mayor tasa de pérdida de datos ocurre cuando las plantas son trasladadas a nuevos lugares”, explica Murrell.

Para evaluar la magnitud del problema, el equipo de investigación realizó un análisis genético de 65 ejemplares. Los resultados confirmaron lo que los registros sugerían: la diversidad genética en las colecciones botánicas es baja y la endogamia es generalizada.

La importancia de conservar la diversidad genética

El Amorphophallus titanum es una especie endémica de Sumatra, y su población silvestre ha disminuido drásticamente en los últimos años. Según una estimación reciente publicada en la revista Biodiversity and Conservation, solo quedan 162 individuos en su hábitat natural. La conservación en jardines botánicos es, por lo tanto, una estrategia clave para evitar la extinción de la especie.

“Si no se toman medidas, la población en cautiverio podría extinguirse por endogamia antes de que podamos reintroducirla en la naturaleza,” advierte Murrell. “Es fundamental mantener registros estandarizados y centralizados para gestionar mejor la diversidad genética”.

Recomendaciones para mejorar la conservación

Para abordar este problema, Murrell y su equipo han propuesto cinco medidas clave para mejorar la gestión de los registros y evitar la endogamia:

  1. Documentar la procedencia y los padres de cada planta recolectada en estado silvestre.
  2. Estandarizar la recopilación de datos en todas las instituciones.
  3. Rastrear los progenitores de cada planta a través de distintas instituciones.
  4. Garantizar que los datos viajen con la planta cuando esta es transferida a otra ubicación.
  5. Establecer un lenguaje común para el mantenimiento de registros, asegurando que todas las instituciones utilicen definiciones consistentes.

Implementar estas medidas permitirá a los jardines botánicos tomar decisiones informadas sobre la reproducción del Amorphophallus titanum, aumentando sus probabilidades de supervivencia tanto en cautiverio como en el medio silvestre. Si se mejora la gestión de registros, la especie podrá florecer y evitar el riesgo de desaparecer por completo.

Este estudio subraya la importancia de una administración cuidadosa de los datos en la conservación de especies en peligro. Si no se toman medidas pronto, la ‘flor cadáver’ podría pasar de ser una rareza botánica a un recuerdo del pasado.

Fuente: O G Murrell, Z Diaz-Martin, K Havens, M Hughes, A Meyer, J Tutt, N Zerega, J B Fant, Using pedigree tracking of the ex situ metacollection of Amorphophallus titanum (Araceae) to identify challenges to maintaining genetic diversity in the botanical community, Annals of Botany, 2025;, mcaf038, https://doi.org/10.1093/aob/mcaf038

Sin comentarios