Un nuevo estudio ha descubierto las tres estrategias más eficaces para decir adiós al cigarrillo para siempre. Aunque es importante mencionarlo de inmediato: no todos los métodos están disponibles en todos los países.
El estudio, realizado por el Grupo Cochrane de Adicción al Tabaco (Cochrane Tobacco Addiction Group, CTAG), una organización sin ánimo de lucro especializada en la adicción al tabaco, analizó una gran cantidad de datos. Los investigadores revisaron 14 revisiones Cochrane para el estudio. Las revisiones Cochrane son estudios exhaustivos que resumen los resultados de múltiples estudios científicos, con el objetivo de extraer conclusiones sobre la eficacia de los tratamientos médicos.
El tridente de oro contra la adicción al tabaco
Del estudio se desprenden tres métodos que ofrecen a los fumadores la mejor oportunidad para dejar de fumar. El primero es el uso de vareniclina, un medicamento de venta con receta conocido también bajo el nombre de Champix. El fármaco reduce las ansias de nicotina y alivia los síntomas de abstinencia. Es importante tenerlo en cuenta: Champix no está disponible en algunos países desde 2021. Sin embargo, todavía pueden obtenerse sustancias alternativas similares, como el bupropión, llamado también Zyban. Por cierto, el estudio demuestra que el bupropión también resulta eficaz en combinación con las dos técnicas siguientes.
El segundo fármaco más eficaz es la citisina, una sustancia de origen vegetal que generalmente se puede adquirir con receta médica en varios países. La citisina ayuda a dejar de fumar al imitar algunos de los efectos de la nicotina en el cerebro.
La tercera forma más eficaz de dejar de fumar, según el estudio, son los cigarrillos electrónicos con nicotina. Esto permite a los fumadores obtener nicotina de forma alternativa mientras dejan de fumar. Pero es importante tener en cuenta que los cigarrillos electrónicos distan mucho de ser saludables. Aunque no emiten alquitrán y pueden reducir el riesgo de cáncer, empiezan a acumularse pruebas de que son tan perjudiciales para el sistema cardiovascular como el tabaco normal. Sin embargo, según el estudio, funcionan muy bien como ayuda temporal.
El poder de la terapia
El estudio destaca que estos métodos son más eficaces cuando se combinan con terapia conductual. Además (como ya se ha mencionado), el bupropión también resulta eficaz. Las terapias sustitutivas de la nicotina, por ejemplo los parches de nicotina o los chicles, también pueden ayudar, sobre todo cuando se combinan ambas.
La Dra. Hartmann-Boyce, una de las autoras del estudio, publicado en la revista Addiction, subraya la importancia de estos resultados: “Para las personas que fuman cigarrillos, dejar de fumar es lo mejor que pueden hacer por su salud. Sin embargo, a muchas personas les resulta difícil hacerlo. Afortunadamente, hay pruebas sólidas de que el uso de distintas formas de dejar de fumar funciona”.
Millones de personas mueren cada año
En todo el mundo, el tabaquismo sigue siendo una de las principales causas evitables de morbilidad y mortalidad, con más de 7 millones de muertes al año. “Dejar de fumar es difícil y a algunas personas les cuesta más que a otras, pero el tabaco es uno de los productos de consumo legal más mortíferos. Por eso es importante buscar ayuda para dejar de fumar”, afirma Jonathan Livingstone-Banks, autor principal del estudio.
Fumar tiene graves consecuencias para la salud, como un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, cáncer de pulmón, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y otras infecciones pulmonares. Reduce la función pulmonar y puede provocar problemas respiratorios y reducir la salud en general. Además de los efectos físicos directos, fumar también contribuye al envejecimiento prematuro de la piel y puede reducir la fertilidad. Además, fumar es perjudicial para los transeúntes debido a la exposición al humo ajeno, que también plantea riesgos para la salud.
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