Cinco años después de que finalizara la vida útil del telescopio espacial Kepler, los científicos han descubierto un nuevo sistema solar con hasta siete planetas en la gran cantidad de datos recogidos por el telescopio.
Los planetas en cuestión orbitan alrededor de Kepler-385: una estrella similar al Sol que es un 10 % mayor y un 5 % más caliente que nuestra estrella madre. Los dos planetas interiores son ligeramente mayores que la Tierra y probablemente rocosos. Se supone que también poseen una fina atmósfera. Los cinco planetas exteriores tienen aproximadamente el doble de tamaño que nuestro planeta y se supone que están envueltos en una gruesa atmósfera.
El sistema es especial por varias razones. En primer lugar, hasta ahora solo conocemos unos pocos sistemas solares con más de seis planetas verificados (véase el recuadro). Además, lo llamativo es que este sistema está formado por planetas, cada uno de los cuales es brillante. “Kepler-385 es el primer sistema planetario descubierto que alberga siete planetas calientes”, afirma el investigador Jack Lissauer.
Verificando la existencia de planetas
El cazador de planetas Kepler estuvo operativo entre 2009 y 2018 y detectó planetas mediante el llamado método de tránsito. En pocas palabras, el telescopio espacial observó estrellas durante largos periodos de tiempo, con la esperanza de observar cómo su brillo disminuía con cierta regularidad. Estas disminuciones de brillo podrían indicar la presencia de un planeta que se mueve ocasionalmente entre su estrella madre y Kepler, bloqueando temporalmente parte de la luz estelar. Kepler ha descubierto así miles de planetas candidatos. Se trata de planetas cuya existencia, a juzgar por las observaciones del Kepler, es plausible, pero aún no está demostrada. Se necesitan observaciones de seguimiento (a menudo con otros telescopios) para verificar su existencia y convertir un planeta candidato en un planeta.
Planetas incandescentes
Kepler estudió Kepler-385 durante mucho tiempo y encontró disminuciones de brillo que insinuaban la presencia de planetas. En 2014 ya se confirmó la existencia de algunos de esos planetas. Pero un nuevo análisis de los antiguos datos de Kepler permite ahora a los investigadores promover también como planetas a los restantes candidatos alrededor de Kepler-385.
Esto eleva a siete el número total de planetas descubiertos alrededor de esta estrella. Además, los investigadores ya pueden caracterizar razonablemente bien esos planetas y decir algo más sobre su tamaño, naturaleza (rocosa o no) y atmósfera, por ejemplo. Además, sabemos que los planetas están muy cerca de su estrella y, por tanto, bañados por la luz estelar. Puede adivinar el resultado: los planetas brillan.
“Esta nueva investigación demuestra que aún se puede extraer mucha información de la misión Kepler, a pesar de que ya ha finalizado”, afirma el investigador Jason Steffen. “Al examinar estos sistemas planetarios distantes, obtenemos una mejor imagen de nuestra propia historia y hasta qué punto difiere de las historias de otros sistemas”.
Sobre la investigación
El descubrimiento de que siete planetas orbitan alrededor de Kepler-385 es solo uno de los aspectos más destacados de un nuevo estudio, en el que los científicos volvieron a analizar los datos recogidos por Kepler entre 2009 y 2018. El objetivo no era solo confirmar la existencia de una serie de planetas candidatos a través de ese análisis; los investigadores también querían caracterizar con mayor precisión los planetas descubiertos por Kepler.
“Ahora que hemos tenido algún tiempo para analizar los datos, podemos afinar nuestras estimaciones con respecto a algunas propiedades de los planetas en diferentes sistemas - como su período orbital y tamaño”, explica Steffen. “Este es el catálogo definitivo de planetas descubiertos durante la misión Kepler”. Este “catálogo” cuenta con casi 4400 planetas (candidatos). Algunos de estos planetas no están solos, sino que (al realizar sus órbitas alrededor de la estrella progenitora) están acompañados por uno o más planetas: el nuevo catálogo cuenta con más de 700 de estos sistemas multiplanetarios. “Hemos elaborado la lista más precisa de candidatos a planetas descubiertos por Kepler y de sus propiedades”, concluye Lissauer.
La ayuda del telescopio Gaia
Por cierto, el nuevo catálogo ha sido posible en parte gracias a otros observatorios. Por ejemplo, los investigadores recurrieron a Gaia: un satélite que puede determinar con gran precisión la distancia, la posición y los movimientos de las estrellas, entre otras cosas, y que también monitoriza los cambios en su brillo. Esos datos no solo proporcionan mucha más información sobre las estrellas en cuestión, sino que también son relevantes para nuestra comprensión de cualquier planeta que orbite a su alrededor. Por ejemplo, los investigadores pueden utilizar los datos de Gaia para determinar con precisión el periodo orbital de un planeta. Por cierto, un análisis de esos periodos orbitales también da lugar a un descubrimiento notable. A saber, que los planetas que forman parte de un sistema que contiene múltiples planetas tienden a tener una órbita más cicular que los planetas que orbitan alrededor de una estrella progenitora en solitario o con una única compañera.
Por supuesto, el catálogo no es solo un producto acabado; los investigadores esperan que sea el preludio de algo más. A saber, una mejor comprensión de otros sistemas planetarios y, con ello, una mejor imagen de lo especial que puede o no ser el nuestro, que contiene vida.
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